Para proteger al máximo la piel de nuestros hijos necesitamos un jabón que sea tolerante, dermatológico y sobre todo adaptado a la sensibilidad de una dermis tan delicada como la de los niños.
El gel-champú infantil de la línea Pon-emo cumple y supera todos estos requisitos, gracias a una composición enriquecida con ácido mandélico que actúa como un antiséptico suave de la piel.
Mejora la higiene diaria de tus hijos con una fórmula que no irrita los ojos y que también puede aplicarse sobre el cabello.
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