Leche Corporal Hidratante Baby 100Ml. Eco

Descripción:

Esta leche corporal hidratante cuida suavemente la piel normal a seca y sensible del bebé, y de adultos, especialmente si tiende a reacciones alérgicas. Calma la piel y refuerza su resistencia. Suaviza la piel con aloe vera y el extracto de algas que deja la piel suave y calma las irritaciones y reduce la picazón. Refuerza la resistencia de la piel frente a estímulos externos. Es de textura cremosa para una agradable sensación en la piel de hidratación de larga duración. Reduce al mínimo el riesgo de reacciones alérgicas. Dermatológicamente probado, incluso sobre piel sensible.

Modo de empleo

Masajear 2 veces al día en las zonas del cuerpo que no presenten lesiones.

Composición

Aqua, Glycine Soja Oil* (Aceite de soja ecológico, emoliente), Glycerin (Glicerina vegetal emoliente), Glyceryl Stearate (Emulsionante, emoliente de origen vegetal), Cetearyl Alcohol (Alcohol de derivación vegetal, emoliente / emulsionante / estabilizador de emulsiones / opacante / viscosizante), Sodium Stearoyl Lactylate (Emulsionante, humectante), Aloe Barbadensis Leaf Extract* (Extracto de hojas de Aloe Vera de agricultura ecológica, emoliente), Chondrus Crispus Powder (Carragenina obtenida de algas rojas, ligante, estabilizador de emulsiones), Sodium Dehydroacetate, Glucose (Azúcar, humectante), Tocopherol (Vitamina E, antioxidante de origen natural), Xanthan Gum (Viscosizante de origen natural), Sodium Benzoate (Conservante natural-idéntico). Ethylhexylglycerin, Parfum (Per fume certificado por Icea), Sodium Hydroxide (Neutralizante, regulador de pH), Limonene.

Consejo Farmacéutico

La Vitamina E es una vitamina liposoluble, es decir, se puede disolver en grasas y aceites. Actúa como un potente antioxidante protegiendo las membranas de las células contra los daños causados por los radicales libres (como consecuencia de la contaminación o la radiación solar ultravioleta) y por tanto, ayuda a prevenir el envejecimiento cutáneo.

Además, apoya al sistema inmunitario e inhibe la agregación de las plaquetas, según la dosis. También está implicada en la regulación de numerosas enzimas. Las células utilizan la Vitamina E para interactuar entre sí y llevar a cabo funciones importantes del organismo como el mantenimiento de la visión y/o el movimiento en músculos y nervios.

Podemos encontrar la vitamina E en alimentos como aceites vegetales de oliva, girasol o sésamo; en frutos secos (avellanas o almendras); también está presente, en menor cantidad, en las hortalizas (como la espinaca y el brócoli). Algunos fabricantes agregan vitamina E como aditivo por su función antioxidante. Antes de tomar un complemento alimenticio con vitamina E, si tienes dudas, consulta con un profesional sanitario.

En cosmética, también se aprovecha su potencial antioxidante y se incluye en la formulación de productos para el cuidado cutáneo (tocopherol y derivados). Es una vitamina antiinflamatoria, contrarresta el daño oxidativo y preserva el colágeno en la dermis, ayudando a mantener la estructura de la piel. También se encuentra en productos antiaging combinada con Vitamina C ya que consigue regenerar el efecto antiox de la Vitamina E y como resultado es una buena sinergia antioxidante.